/ jueves 14 de marzo de 2024

Guanajuato avanza hacia la inclusión

El pasado 15 de febrero, el pleno del Congreso del Estado de Guanajuato aprobó por unanimidad la creación de la Ley para las Personas de la Diversidad Sexual y de Género del Estado de Guanajuato y sus Municipios, con el objetivo de establecer mecanismos de colaboración entre los municipios y el Estado para promover, proteger y garantizar el pleno ejercicio de los derechos humanos de la comunidad LGBTIQ+.

Esta Ley, que entrará en vigor un día después de su publicación en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado de Guanajuato, busca garantizar a las personas de diversidad sexual y de género el derecho a la libertad, a la identidad, a la certeza jurídica, a la salud, a la participación jurídica y a la igualdad, entre otros.

Con su aprobación, se envía un mensaje claro de que en Guanajuato se respeta la diversidad sexual y de género al promover la igualdad y la diversidad. Se fomenta una sociedad más inclusiva y tolerante, donde todas las personas puedan vivir libres de perjuicios y discriminación.

Esta ley es de suma importancia por varias razones:

  1. Se creará un programa estatal para las personas de la diversidad sexual que contempla la participación de algunas secretarías, los municipios, organismo autónomos y municipales, así como de los poderes judicial y legislativo.
  2. Dicho programa deberá señalar los principales problemas y la descripción de las oportunidades y obstáculos para el desarrollo integral de las personas de la diversidad sexual y de género. Así como las acciones para la adecuada atención y reconocimiento de los derechos de las personas de la diversidad sexual y de género.
  3. Establece medidas específicas para prevenir y combatir la discriminación y la violencia contra las personas LGBTIQ+. Esto es crucial para crear un entorno seguro y acogedor para todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género.

Un área específica dentro del gobierno será responsable de trabajar en la procuración para el desarrollo humano integral de las personas de la diversidad sexual y de género, para brindarles las oportunidades necesarias para alcanzar niveles de tranquilidad y alta calidad de vida, orientado a reducir las desigualdades extremas y las inequidades de género, que aseguren sus necesidades básicas y desarrollen su capacidad en un entorno social incluyente.

Mediante alianzas estratégicas con organizaciones de la sociedad civil y organismos público y privados, se buscará garantizar el respeto, la protección y el acceso pleno a los derechos humanos a fin de construir una sociedad digna y equitativa en igualdad de derechos y oportunidades.

Al garantizar que las leyes y políticas protejan los derechos de las personas LGBTIQ+, sin duda alguna, se podrá mejorar su acceso a servicios y recursos esenciales como la atención médica, educación y al empleo. Y se eliminarán barreras que puedan impedir su plena participación en la sociedad.

La aprobación tan necesaria e importante de esta ley marca un importante paso hacia la construcción de una sociedad más tolerante e inclusiva, ya que no únicamente se reconoce y protege los derechos fundamentales de las personas de la diversidad sexual y de género, sino que también envía un mensaje de respeto y aceptación hacia la comunidad LGBTIQ+.

Se están estableciendo mecanismos para prevenir la discriminación y la violencia. Adicionalmente, se crean programas que aseguran el acceso equitativo a servicios y recursos esenciales.

Además, es necesario desarrollar una política pública antidiscriminación de manera transversal, de manera en que las instituciones, tanto públicas como privadas, así como los organismos generen prácticas incluyentes e incorporen dentro de su equipo a personas que estén en una mayor situación de vulnerabilidad.

También, la política pública antidiscriminación debe ser la encargada de capacitar para que los centros de trabajo, escuelas, negocios, entre otros, sepan cómo deben conducirse en materia de igualdad y no discriminación.

Esta Ley refleja un compromiso claro y tangible por promover la igualdad, la diversidad y el respeto a los derechos humanos de todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género.

Es un importante paso hacia la construcción de una sociedad más equitativa, con igualdad y justa para todas y todos.

Titular de la Comisión Estatal de Atención Integral a Víctimas de Guanajuato

@sjrochin

El pasado 15 de febrero, el pleno del Congreso del Estado de Guanajuato aprobó por unanimidad la creación de la Ley para las Personas de la Diversidad Sexual y de Género del Estado de Guanajuato y sus Municipios, con el objetivo de establecer mecanismos de colaboración entre los municipios y el Estado para promover, proteger y garantizar el pleno ejercicio de los derechos humanos de la comunidad LGBTIQ+.

Esta Ley, que entrará en vigor un día después de su publicación en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado de Guanajuato, busca garantizar a las personas de diversidad sexual y de género el derecho a la libertad, a la identidad, a la certeza jurídica, a la salud, a la participación jurídica y a la igualdad, entre otros.

Con su aprobación, se envía un mensaje claro de que en Guanajuato se respeta la diversidad sexual y de género al promover la igualdad y la diversidad. Se fomenta una sociedad más inclusiva y tolerante, donde todas las personas puedan vivir libres de perjuicios y discriminación.

Esta ley es de suma importancia por varias razones:

  1. Se creará un programa estatal para las personas de la diversidad sexual que contempla la participación de algunas secretarías, los municipios, organismo autónomos y municipales, así como de los poderes judicial y legislativo.
  2. Dicho programa deberá señalar los principales problemas y la descripción de las oportunidades y obstáculos para el desarrollo integral de las personas de la diversidad sexual y de género. Así como las acciones para la adecuada atención y reconocimiento de los derechos de las personas de la diversidad sexual y de género.
  3. Establece medidas específicas para prevenir y combatir la discriminación y la violencia contra las personas LGBTIQ+. Esto es crucial para crear un entorno seguro y acogedor para todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género.

Un área específica dentro del gobierno será responsable de trabajar en la procuración para el desarrollo humano integral de las personas de la diversidad sexual y de género, para brindarles las oportunidades necesarias para alcanzar niveles de tranquilidad y alta calidad de vida, orientado a reducir las desigualdades extremas y las inequidades de género, que aseguren sus necesidades básicas y desarrollen su capacidad en un entorno social incluyente.

Mediante alianzas estratégicas con organizaciones de la sociedad civil y organismos público y privados, se buscará garantizar el respeto, la protección y el acceso pleno a los derechos humanos a fin de construir una sociedad digna y equitativa en igualdad de derechos y oportunidades.

Al garantizar que las leyes y políticas protejan los derechos de las personas LGBTIQ+, sin duda alguna, se podrá mejorar su acceso a servicios y recursos esenciales como la atención médica, educación y al empleo. Y se eliminarán barreras que puedan impedir su plena participación en la sociedad.

La aprobación tan necesaria e importante de esta ley marca un importante paso hacia la construcción de una sociedad más tolerante e inclusiva, ya que no únicamente se reconoce y protege los derechos fundamentales de las personas de la diversidad sexual y de género, sino que también envía un mensaje de respeto y aceptación hacia la comunidad LGBTIQ+.

Se están estableciendo mecanismos para prevenir la discriminación y la violencia. Adicionalmente, se crean programas que aseguran el acceso equitativo a servicios y recursos esenciales.

Además, es necesario desarrollar una política pública antidiscriminación de manera transversal, de manera en que las instituciones, tanto públicas como privadas, así como los organismos generen prácticas incluyentes e incorporen dentro de su equipo a personas que estén en una mayor situación de vulnerabilidad.

También, la política pública antidiscriminación debe ser la encargada de capacitar para que los centros de trabajo, escuelas, negocios, entre otros, sepan cómo deben conducirse en materia de igualdad y no discriminación.

Esta Ley refleja un compromiso claro y tangible por promover la igualdad, la diversidad y el respeto a los derechos humanos de todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género.

Es un importante paso hacia la construcción de una sociedad más equitativa, con igualdad y justa para todas y todos.

Titular de la Comisión Estatal de Atención Integral a Víctimas de Guanajuato

@sjrochin