León, Gto.- Una de las obras de ballet más aclamadas en el mundo volvió a León, El Cascanueces y su magia inspirada en la Noche Buena cautivó a los asistentes, con tres fechas en sold out celebradas en el Teatro del Bicentenario Roberto Plasencia Saldaña, recinto que fue tomado por el reconocido Ballet de Monterrey.
De la mano del mago Drosselmeyer, adultos y menores acompañaron a Clarita, protagonista de la historia y al gallardo Cascanueces en su lucha contra el Rey Ratón, además de viajar junto a ellos por escenarios de fantasía como el Mundo de las Nieves y País de las Golosinas.
A lo largo de los dos actos en los que se divide esta puesta en escena, diversos personajes demostraron gracia en su danza basada en la coreografía original de Lev Ivanov, además de especial sincronía con las piezas musicales compuestas por Piotr Ilich Tchaikovsky en esta obra, cuyo estreno se remonta al 17 de diciembre de 1892 en el Teatro Mariinski de San Petersburgo, Rusia.
Esta puesta en escena con duración de 120 minutos, los aplausos del público se complementaron con las melodías, al igual que las carcajadas de más de alguno en respuesta a las tropas del Rey Ratón que antes de luchar con los soldaditos de plomo realizaron ejercicios y posturas de fisicoculturistas.
Los delicados movimientos de las bailarinas complementaron al personaje de Clarita en piezas especiales como el Vals de los Copos de Nieve y el Vals de las Flores, robaron emociones de los presentes. Extendiendo la magia al auditorio, hubo un momento en el que, al igual que el escenario, sobre las butacas se simuló la caída de copos de nieve, donde varios niños hicieron esfuerzo por atraparlos desde sus asientos.
Esta travesía llegó a su fin con Clarita despertando en su habitación con su cascanueces de juguete entre sus brazos, para luego tomar posición junto a Drosselmeyer, mientras el resto de los personajes se incorporaban, entre ellos el Cascanueces vuelto un príncipe.
A manera de despedida, todos los bailarines hicieron una reverencia que fue respondida por los aplausos eufóricos que resonaron por varios minutos a la vez que el telón bajó.
Enmarcando el 13° aniversario del Teatro del Bicentenario, esta presentación fue encabezada por el director artístico de origen cubano Yosvani Ramos, al igual que Luis Serrano como coreógrafo repositor. Bajo los reflectores se presentaron alrededor de un centenar de bailarines, cifra de la que casi 50 fueron miembros del Ballet de Monterrey.
Para beneplácito de la danza en Guanajuato, se contó con la participación de menores de una decena escuelas de danza locales como Ballet y Arte Coppélia, Alejandra del Toro Studio, Beatriz Jiménez Studio de Ballet, Dance Premiere, Escuela de Danza Brisé, Kine-Tempo, Musiballet, entre otras.
