/ lunes 27 de mayo de 2024

Ideología y Educación

En días recientes escuché una entrevista en la que se abordaba el tema que hoy es motivo de reflexión ¿hay ideología en el proceso educativo? En un acercamiento inicial de análisis pareciera que la palabra ideología es un concepto exclusivo de la política y por otra parte matizada de tintes marxistas, evitando con ello, relacionar ideología con Educación, al transferir juicios de valor de carácter moral al inferir que los contenidos ideológicos pervierten a la Educación per se. Un segundo cuestionamiento expuesto es presumir por uno de los entrevistados que el modelo educativo actual está influenciado de ideología lo cual es nocivo para el proceso formativo mismo.

Ante las consideraciones expuestas puntualizo las siguientes argumentaciones:

El saber ideológico tiene acepciones diversas, una de ellas es su connotación epistemológica lo cual significa que el conocimiento científico se construye a partir de un saber ideológico que representa una primera explicación del objeto a revelar. Una amplia disertación sobre el tema lo presenta Marcelo Pasternac y otros en su obra “Psicología, ideología y ciencia”. Los postulados ahí descritos permiten superar la noción equivoca que afirma que la Educación debe estar ajena al saber ideológico, toda vez que las ciencias tienen como insumo un debate permanente, dialéctico con el conocimiento ideológico que lo antecede y es motivo de rupturas y transiciones.

Afirmar categóricamente que el modelo educativo actual está matizado por una carga ideológica, arguyendo una apreciación negativa que lo demerita, resulta totalmente infundado desde la dimensión epistémica que funda mi disertación, precisando que todo modelo educativo define un concepto de sociedad, de hombre, el cual se pretende formar, es la acepción política del término, íntimamente vinculado a fundamentos de carácter filosóficos.

Por lo tanto, el tema a debatir no se limita a un plano superficial y simple en juzgar si los planes y programas de estudio están acompañados de ideologías, que como ya lo puntuaba todo plan de estudios tiene como sustento un marco ideológico en sus acepciones política y epistemológica.

Para la sociedad y en particular para el magisterio, es importante que identifiquen y reconozcan que tipo de ideología caracteriza a los modelos educativos recientes y el actual, toda vez que cada orientación partidista elige y construye un modelo educativo acorde a su plataforma estructural que le dio origen. Encubrir el posicionamiento ideológico señalando como propio de unos y ajeno de otros es a la luz del análisis científico plenamente infundado.

Hoy afortunadamente el pueblo y los educadores tienen acceso a una red de comunicación más amplia no limitada a los dictados que durante años caracterizó los espacios informativos, convirtiendo la diversidad de opiniones en un valor para la democracia tan anhelada. Más grave aún lo representa el argumentar públicamente promover un modelo educativo humanista cuando en su operación se ocupó en judicializar la tarea del maestro, demeritando por diversos medios su función social y pedagógica, lo anterior no es ajeno a la búsqueda por recuperar el terreno perdido aspirando a simular una ideología humanista que en la praxis no ocurrió.

Comparto mi correo para continuar orientando a los interesados en temas relacionados a la salud emocional zavalafranciscoramirez@gmail.com

Francisco Javier Zavala Ramírez

En días recientes escuché una entrevista en la que se abordaba el tema que hoy es motivo de reflexión ¿hay ideología en el proceso educativo? En un acercamiento inicial de análisis pareciera que la palabra ideología es un concepto exclusivo de la política y por otra parte matizada de tintes marxistas, evitando con ello, relacionar ideología con Educación, al transferir juicios de valor de carácter moral al inferir que los contenidos ideológicos pervierten a la Educación per se. Un segundo cuestionamiento expuesto es presumir por uno de los entrevistados que el modelo educativo actual está influenciado de ideología lo cual es nocivo para el proceso formativo mismo.

Ante las consideraciones expuestas puntualizo las siguientes argumentaciones:

El saber ideológico tiene acepciones diversas, una de ellas es su connotación epistemológica lo cual significa que el conocimiento científico se construye a partir de un saber ideológico que representa una primera explicación del objeto a revelar. Una amplia disertación sobre el tema lo presenta Marcelo Pasternac y otros en su obra “Psicología, ideología y ciencia”. Los postulados ahí descritos permiten superar la noción equivoca que afirma que la Educación debe estar ajena al saber ideológico, toda vez que las ciencias tienen como insumo un debate permanente, dialéctico con el conocimiento ideológico que lo antecede y es motivo de rupturas y transiciones.

Afirmar categóricamente que el modelo educativo actual está matizado por una carga ideológica, arguyendo una apreciación negativa que lo demerita, resulta totalmente infundado desde la dimensión epistémica que funda mi disertación, precisando que todo modelo educativo define un concepto de sociedad, de hombre, el cual se pretende formar, es la acepción política del término, íntimamente vinculado a fundamentos de carácter filosóficos.

Por lo tanto, el tema a debatir no se limita a un plano superficial y simple en juzgar si los planes y programas de estudio están acompañados de ideologías, que como ya lo puntuaba todo plan de estudios tiene como sustento un marco ideológico en sus acepciones política y epistemológica.

Para la sociedad y en particular para el magisterio, es importante que identifiquen y reconozcan que tipo de ideología caracteriza a los modelos educativos recientes y el actual, toda vez que cada orientación partidista elige y construye un modelo educativo acorde a su plataforma estructural que le dio origen. Encubrir el posicionamiento ideológico señalando como propio de unos y ajeno de otros es a la luz del análisis científico plenamente infundado.

Hoy afortunadamente el pueblo y los educadores tienen acceso a una red de comunicación más amplia no limitada a los dictados que durante años caracterizó los espacios informativos, convirtiendo la diversidad de opiniones en un valor para la democracia tan anhelada. Más grave aún lo representa el argumentar públicamente promover un modelo educativo humanista cuando en su operación se ocupó en judicializar la tarea del maestro, demeritando por diversos medios su función social y pedagógica, lo anterior no es ajeno a la búsqueda por recuperar el terreno perdido aspirando a simular una ideología humanista que en la praxis no ocurrió.

Comparto mi correo para continuar orientando a los interesados en temas relacionados a la salud emocional zavalafranciscoramirez@gmail.com

Francisco Javier Zavala Ramírez