La falta de microchips también afectó a los usuarios de transporte público de la ciudad, ya que la falta de estos insumos ha parado la creación de tarjetas pagobús, por lo que a su vez los leoneses han tenido que pagar el pasaje completo.
Desde hace algunos meses, en las estaciones de transferencia no se cuenta con los plásticos de las tarjetas pagobús, para constatar lo anterior, El Sol de León realizó un recorrido por los diferentes puntos de venta de estas tarjetas y en todas coincidían que la falta de insumos retrasó la producción.
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“Como las tarjetas no las elaboran aquí, el chip que tiene esta tarjeta ya no se está fabricando por falta de insumos, son escasos, los mismos proveedores están batallando con los insumos por eso no han podido ingresar las tarjetas aquí”, aseguró Esther una de las encargadas de la venta de estas tarjetas.
Por otra parte, en las oficinas de Pagobús del Centro Histórico aseguraron que desde el 20 de septiembre no se han entregado ningún tipo de tarjetas, al mismo tiempo que no pueden dar a los usuarios una fecha de cuando les llegarán estas tarjetas.
“Ni siquiera tenemos tarjetas generales, creo que ya en ninguno de los paraderos, es en general con todas, si acaso una que otra que todavía tenían pero son de discapacidad, esas fueron las últimas que alcanzaron a llegar, porque ya no hay ni las rojas de estudiante, ni las de la tercera edad, ni generales, a los usuarios no les hemos asegurado una fecha porque ni nosotros la sabemos”, mencionó Mayra cajera de uno de las oficinas de Pagobús.
Escasez de Chips
La escasez de microchips se debió a cuestiones políticas, de logística y producción ocasionadas por la pandemia y la alta demanda de los productos tecnológicos.
A diferencia de otros sectores, la industria de los semiconductores imposibilita un rápido incremento de su producción, ya que se requiere inversión y construcción de infraestructura necesaria, misma que puede tomar de 3 a 5 años aproximadamente.
Cabe destacar que algunos eventos como las heladas en Texas donde se encuentra la planta de microchips más grande del mundo, misma que se quedó sin energía eléctrica a causa de estas heladas, por lo que la producción frenó por completo.
En Japón, una de las plantas más importantes de microcontroladores, sufrió un incendio que ocasionó el paro total de sus operaciones durante un mes, mientras que el 85% de los chips que se fabrican en Taiwán y Corea del Sur, para su manufactura se requiere una abundante cantidad de agua, por lo que a causa de la gran sequía en Taiwán en los últimos meses, no se ha producido lo suficiente para satisfacer la demanda de los mismos.
La industria mexicana estima que a mediados del año 2022, esta industria ya se encuentre normalizada.