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León, Gto.- El Arzobispo de la Catedral Metropolitana de León, Alfonso Cortés, invitó a los leoneses a reforzar su vida espiritual y fortalecer su dignidad con acciones solidarias al prójimo, así también a dejar de lado los intereses materiales y acercarse más a Dios.
Durante la celebración eucarística de cada domingo en la Catedral Metropolitana, el arzobispo mencionó que los bienes materiales se deben compartir, para impulsar la dignidad de los que menos tienen, pues hoy en día existen varios mexicanos que diariamente tienen hambre y que eso no es algo digno.
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“Los bienes materiales se comparten, pero se comparten en la dignidad del ser humano, por eso la injusticia, por eso la injusticia que vivimos actualmente, decir que en México 50 millones de mexicanos tienen hambre es una vergüenza para nosotros, comenzando por los católicos”, indicó.
El arzobispo de León insistió que el ser humano debe de buscar siempre una vida acompañada de Dios y no de bienes materiales, que al final del día solo brindan una vida vacía a los católicos.
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Insistió que los seres humanos tienen derecho a contar con una vida digna, en la que pueda tener trabajo, educación, comida, libertad, tranquilidad, religión, entre otras.
“El primer derecho de un ser humano es su religión, es su fe y de ahí vienen todos los demás derechos, el derecho a tener agua, el derecho a tener comida, el derecho a tener educación, a tener un trabajo, a tener un techo en donde vivir, a tener libertad de expresarse como personas”, mencionó.
Alfonso Cortés reiteró que la dignidad humana fortalece la fe en Dios, por lo que la sociedad debe ser generosa con el prójimo para que también se dignifique su vida y así pueda haber menos personas necesitadas y con el mismo derecho.
Indicó que las buenas acciones no requieren de reconocimiento por los demás, ni tampoco se deben esperar siempre de las autoridades, todo lo contrario, cuando una acción es voluntaria, eso les permite acercarse a Dios, pues ser hijos de él es el mayor reconocimiento.
“En esta sociedad se habla mucho de derechos humanos y es la fuente de los derechos humanos, es la dignidad de ser hijos de Dios, no es que nos reconozcan, no es que nos den otros, las autoridades, los derechos son inherentes a la dignidad del ser humano”, señaló.
