Jaral del Progreso, Gto. (OEM-Informex).- Una de las tradiciones de la panificación en este municipio es la conocida “Fruta de Horno”. Bajo un horneado artesanal estas piezas elaboradas por sólo algunas familias han llegado hasta la India y, por supuesto, a varios condados de los Estados Unidos.
Pasadas esta temporada de fiestas Navideñas con el retorno de los connacionales al vecino país del norte, el pan va con ellos a satisfacer más paladares allende las fronteras.
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Josefina González es originaria de esta ciudad y aunque tiene 70 años de edad continúa en el horneado de tan deliciosos panecillos en su propia casa, donde instaló el horno que ha llevado sabor a miles de familias.
La señora Josefina nació en 1950 y en 1978, al cumplir los 28 años de edad acudió con Don Francisco Arroyo, quien tenía uno de los primeros negocios en la ciudad de la tradicional “Fruta de Horno”.
“Yo trabajé con el señor que la hacía originalmente. Ya de ahí me enseñé y le trabajé hasta que el murió...yo he de haber tenido unos 28 años...”, dice mientras trabaja en la parte final de la elaboración del pan.
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Dice que Francisco Arroyo tenía ya muchos años trabajando la “Fruta de Horno “y era muy conocido en la ciudad por la calidad del producto. Pero dice desconocer el por qué siempre se le ha conocido como “Fruta de Horno”, tal vez por las pasas que llevan algunos mamones, sugiere.
Mientras comenta su experiencia en este trabajo artesanal su hijo Alfredo Rodríguez de 47 años hacer algunas labores cerca del horno ubicado en un espacio alterno y eventualmente entra al área donde la señora Josefina continua sin dejar de hacer algo para decorar los panes.
Ahí en la casa de la calle Temblor del 85 se elaboran los polvorones, mamones de coco, mamones de chocolate con pasas o con nuez y empanadas que luego empaquetan en cajas de cartón para ser vendidas y en algunos casos llevadas al interior de la república o a los Estados Unidos.
Vienen compradores de la “Fruta de Horno” procedentes de Las Vegas, Arizona, Chicago, Los Ángeles e incluso las han enviado a la India. Del estado llegan de Valle de Santiago, Cortazar, Celaya, Querétaro y de Guanajuato capital.
“Empezamos a las seis de la mañana o antes, todo depende del encargo y ya a las nueve y media casi venimos terminando “, dice la mujer entre ingredientes con los que prepara este producto icónico en el municipio.
Luego de que terminan de preparar la “Fruta de Horno “a las diez de la mañana se va al mercado su nieto José Alfredo Rodríguez a quien ya lo espera su clientela cada día de tianguis.
“Viene mucha gente de fueras sobre todo en tiempos de Semana Santa. y Navidad ya cuando van de salida es cuando vienen”, dice con voz maternal.
En la casa donde vive con su familia, tiene ya 35 años horneando y desde hace casi 40 años que inició con esta tarea, por lo que ya lo hace “con ojos cerrados”.
