TAMPICO, Tam.- La Iglesia católica no requiere de una cartilla para predicar moralidad entre sus fieles, aseveró el Arzobispo de Antequera, Oaxaca, Pedro Vázquez Villalobos, antes de partir de esta ciudad tras haber participado en la toma de posesión del nuevo obispo de la diócesis local, José Armando Álvarez Cano.
“Nosotros promovemos la cuestión moral, con cartilla o sin cartilla, a eso no dedicamos a promover, a motivar a nuestro pueblo a que viva bien, a que vivamos los mandamientos de Dios, a que seamos personas de bien” aseguró.
En su ruta de difusión, el gobierno federal informó que se apoyará en la red de iglesias evangélicas para repartir los ocho millones de ejemplares que se imprimieron de la cartilla moral, con lo que la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador busca reparar el tejido social.
Al respecto, el arzobispo Vázquez Villalobos indicó que la moralidad es algo que se promueve entre los católicos “con o sin cartilla”, ya que en los templos se motiva a las familias católicas a ser personas de bien.
Aceptó, que desconoce lo que cite la cartilla impresa por el gobierno federal y dijo estar consiente de que la comunidad, ha visto con malos ojos el actuar de las iglesias cristianas.
“Yo no la conozco (la cartilla moral), yo no sé lo que dice, pero me imagino que va por ahí, y no lo sé, si vamos a repartirla, pero parece que ya lo están viendo medio mal porque dicen que eso no lo deben de hacer las asociaciones religiosas, pero no lo sé, hasta ahorita no nos han dicho a nosotros absolutamente nada” concluyó.
En tanto, en el marco del “Coloquio sobre la Cartilla Moral de Alfonso Reyes”, José Manuel Cuéllar Moreno, filósofo e historiador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), afirmó que la cartilla es un texto actual y visionario porque propone el respeto a la naturaleza y el reciclaje.
“No son mandamientos, son lecciones. Tampoco son propuestas doctrinarias, ni exhorto a deberes, sino orientaciones mínimas de expresión. Da pautas y criterios para evaluar las acciones cotidianas de cada uno para asociarlas a la familia, a la sociedad y la ecología. Los círculos concéntricos del respeto se asocian a diferentes aspectos de la vida cotidiana, por ello es un planteamiento pedagógico”, subrayó el historiador.