León, Gto.- El Centro de Conciliación Laboral del Estado de Guanajuato recibe al mes un aproximado de 900 asuntos principalmente por despido injustificado.
Juana Haydee Escobar Porras, directora general de la institución, comentó que la cifra se ha mantenido durante los últimos meses y explicó que tanto el acoso como la violencia laboral y trabajo infantil no son de su competencia de acuerdo a la Ley Federal del Trabajo.
“Aquí en León estamos recibiendo alrededor de 900 asuntos por mes que representa al 60% de la carga laboral del estado. Despido laboral injustificado es el principal motivo. En el tema de acoso sexual a mujeres nosotros no somos competentes”, dijo
La funcionaria explicó que de estos 900 casos por mes tienen una efectividad del 87% en los casos de resolución que son los convenios que realizan dentro del Centro de Conciliación Laboral.
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Dijo que la Ley Federal del Trabajo les marca un término para concluir con el proceso de la conciliación laboral que es de 45 días, por lo que dijo que a partir de que llega un asunto a sus manos por parte del solicitante, se programa una audiencia no mayor a 15 días -y depende del número de audiencias- pero no se puede exceder de se lapso.
Con los casos que no logran conciliarse en estos días, la directora comentó que se les expide una constancia de no conciliación y pueden acudir ante los tribunales laborales del Poder Judicial para presentar su demanda e iniciar un juicio laboral.
“Lo que sí hemos tenido un aumento es en la ratificación de convenios, entonces eso nos indica que sí puede haber una pequeña disminución dentro de las solicitudes de conciliación porque estamos recibiendo alrededor de 1 mil 500 ratificaciones por mes, hay empresas que nos hablan para que les ratificamos sus convenios que es unos de los servicios que tenemos, esto es cuando ambas partes ya llegaron a un acuerdo previo para la terminación de la relación laboral”, agregó.
Comentó que hay empresas que ratifican hasta 20 casos y eso abona a la paz laboral del estado porque ya no se necesita una solicitud y tampoco se va a un juicio, pues las partes ya están teniendo la cultura de la conciliación previa.