La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) propuso un techo de endeudamiento interno neto del gobierno federal de un billón 990 mil millones de pesos para el próximo año.
De acuerdo con la Iniciativa de Ley de Ingresos de la Federación (ILIF), el monto 70 por ciento mayor al aprobado para este año, que fue de un billón 170 mil millones de pesos.
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Para el endeudamiento externo del sector público, que incluye al Gobierno Federal y la Banca de Desarrollo, la Secretaría de Hacienda solicitó al Congreso de la Unión un techo de endeudamiento neto de 18 mil millones de dólares.
Dicho monto es tres veces mayor a los cinco mil 500 millones de dólares aprobados este año en la LIF.
Con estos montos, las proyecciones de la dependencia encabezada por Rogelio Ramírez de la O apuntan a que el saldo de la deuda se ubique en 46.5 y 48.8 por ciento del PIB en 2023 y 2024, respectivamente, “con lo cual se mantendrá en un nivel sostenible hacia el mediano plazo”.
“Con respecto a la deuda pública, esta administración se ha diferenciado de las anteriores por su conducción eficiente, logrando mantener un nivel estable y sostenible hacia el mediano plazo, a pesar del volátil entorno generalizado de las tasas de interés a nivel global”, destacó el funcionario al presentar los Criterios Generales de Política Económica 2024.
De igual forma, consideró que un manejo eficiente y sostenible de las finanzas públicas permitirán que los niveles de deuda se mantengan estables durante las próximas administraciones, pues se busca entregar una estabilidad económica para el siguiente sexenio.
En los últimos años, la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador destacó por hacer colocaciones de deuda externa en los primeros meses de cada año. Según la SHCP, estas operaciones se hicieron en esta época para aprovechar las condiciones de los mercados financieros.
Por otro lado, en cuanto a las empresas productivas del Estado, Petróleos Mexicanos (Pemex) y sus subsidiarias solicitaron un techo de endeudamiento interno neto de 138.1 mil millones de pesos y un techo de endeudamiento externo neto de 3.7 mil millones de dólares para el siguiente año.
Además, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y sus empresas productivas subsidiarias solicitan un techo de endeudamiento interno neto de 600 millones de pesos y un techo de endeudamiento externo neto de 1.2 mil millones de dólares para el mismo año.
DESTINARÁ AMLO 70% DEL GASTO EN DESARROLLO SOCIAL
En su último año de gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador también planea destinar cerca de 67.6 por ciento de todo el gasto programable a programas enfocados al desarrollo social.
Así, para el próximo año se prevé dispersar alrededor de 4.3 billones de pesos en desarrollo social, 7.1 por ciento más que lo previsto para el 2023 y el monto más alto de todo el sexenio.
Este dinero es el que se destina específicamente para tareas de educación, salud, protección social y ambiental, al igual que para cubrir todos los programas sociales de la actual administración, como becas y pensiones.
“El Paquete Económico 2024 sigue con una continuidad en el enfoque social, no creemos que tenga consecuencias para el crecimiento, porque la llegada de empresas extranjeras al país se convirtió en uno de los principales catalizadores de la actividad económica”, afirmó Humberto Calzada, economista en jefe para Rankia Latinoamérica.
Al inicio de la presente administración, este rubro apenas abarcó 63.3 por ciento de todo el gasto programable, con 2.6 billones de pesos y que era superior en 5.7 por ciento frente a lo asignado para 2018.
En aquel año, el presidente López Obrador también instauró una serie de programas prioritarios dentro del desarrollo social, como Jóvenes Construyendo el Futuro y Sembrando Vida.
Así, año con año, el gasto en desarrollo social tuvo un peso más importante para el gobierno federal, ya que también se incrementó el monto de las pensiones para adultos mayores, entre otros segmentos.
De acuerdo con la SHCP, se estima que en la actualidad al menos siete de cada 10 hogares mexicanos reciben algún apoyo de manera directa por parte de la administración pública.
En general, la SHCP espera que la economía mexicana pueda crecer entre 2.5 y 3.5 por ciento durante 2023 y 2024.
Para finales de 2023 se espera que la inflación sea de 4.5 por ciento, con una tasa de interés de 11.3 por ciento, mientras que para el cierre del próximo año la inflación bajará a 3.8 por ciento con una tasa referencial de 9.5 por ciento.
El tipo de cambio, por su parte, concluirá este año en un nivel de 17.5 pesos por dólar, mientras que en 2024 será de 17.1 pesos por unidad.
Respecto a la Mezcla Mexicana de Exportación (MME), la oficina de Rogelio Ramírez de la O espera un costo de 67 dólares por barril, con una producción de 1.95 millones de barriles diarios en 2023.
“Se hubiera podido enfocar más el gasto eficiente para poder buscar crecimiento económico y este desarrollo mediante la inversión en infraestructura, que incluso pudiera impulsar aún más la inversión”, dijo el experto de Rankia Latinoamérica.
En materia de educación, el gobierno federal planea destinar 425.8 mil millones de pesos para impulsar seis rubros, todos prioritarios dentro de la Administración del presidente Andrés Manuel López Obrador como las becas y universidades Benito Juárez, Jóvenes Escribiendo el Futuro, La Escuela es Nuestra y la producción de los nuevos libros de texto.
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En el proyecto de presupuesto para el próximo año que la Federación envió a la Cámara de Diputados se destaca entre esos programas las becas para los distintos niveles a los que destinarán 87 mil 675 millones de pesos.
Para fortalecer la infraestructura en materia educativa, el programa La Escuela es Nuestra tendrá un presupuesto de 28 mil 358.3 millones de pesos. Con información de Nurit Martínez
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