Gerardo N., de 38 años de edad, con antecedentes por delitos de robo y daños, murió durante el transcurso de la tarde noche del viernes en el Hospital Aranda de la Parra, tras recibir un disparo de arma de fuego en la cabeza.

La información preliminar señala que el hoy occiso y su acompañante Jorge Eduardo N., de 20 años de edad, con una lesión de arma de fuego en la parte baja de la espalda, son partícipes de un asalto a mano armada y con violencia en un negocio de la colonia Paseos de Miravalle.

Las autoridades informaron que Gerardo N., fue encontrado lesionado sobre el bulevar Mariano Escobedo a unos metros de la glorieta del bulevar Calcopirita, para después ser llevado en ambulancia al hospital privado Aranda de la Parra, donde a la postre falleció por una herida producida por proyectil disparado por arma de fuego penetrante de cráneo, de acuerdo a lo confirmado por la Procuraduría General de Justicia del Estado.

Jorge Eduardo N., de 20 años de edad, también partícipe del presunto asalto, ingresó al poco tiempo de la agresión al Hospital General de León, hasta el momento se desconoce su situación médica y legal por parte de las autoridades.

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En relación al presunto responsable del homicidio y lesión de los supuestos asaltantes de la colonia Paseos de Miravalle, la Procuraduría General de Justicia del Estado no dio detalles al respecto.

Aunque corre la versión extraoficial, que el justiciero es un integrante activo de la propia PGJE, este aparentemente llegaba con el dueño de visita al negocio, pero al ver el asalto se resguardó y esperó a que los asaltantes abandonarán el lugar para comenzar a seguirlos y realizarles las detonaciones de arma de fuego, información que no fue confirmada por las autoridades.

La esposa del hoy hombre muerto informó a la PGJE, que la última vez que lo vio con vida fue a las 13:30 horas de ese día, cuando le dijo que llevaría su carro, un Ford Fiesta de color rojo a reparar de un neumático, el cual está involucrado en los hechos, pero ya no supo de él hasta que le avisaron que se encontraba tirado sobre el bulevar Mariano Escobedo.