León, Gto.- En el stand de Michoacán ubicado en Poliforum parte de la Feria Estatal de León, se encuentra Ireneo Zalapa Méndez, quien vive en Paracho De Verduzco, Michoacan De Ocampo -noveno pueblo mágico-, tierra arraigada a su herencia cultural que es la laudería, platica sobre la magia de convertir la madera en guitarra.
“Yo soy el artesano y elaboró todos estos instrumentos de cuerda, desde bajitos, guitarra, requintos. La más económica es la de pino que cuesta 1 mil pesos y de ahí 1 mil 500 pesos de cedro blanco a 3 mil 500 de cedro rojo, 5 mil la de palo escrito y algunas piezas que participaron en el Concurso de Constructores de Guitarras en la pasada feria del Pueblo de palo escrito y cedro blanco en 10 mil pesos”, explicó.
La madera con la que le da forma a los instrumentos musicales y los tipos de detalles así como la construcción de la pieza y todos los detalles es que se diferencian en el precio, por ejemplo, la guitarra de pino no suena igual a la cedro rojo y por ello su precio aumenta, además el detalle cuenta mucho.
Ireneo platicó que la magia e ilusión inició a temprana edad cuando su padre el señor Ireneo Zapala Cerano y su tío Indalecio Méndez Ángeles lo iniciaron en la construcción de la guitarra y al pasar de los años tuvo el apoyo de otros tíos de los Rubios y los Herreras que le ha permitido evolucionar en la construcción de la guitarra.
A Ireneo lo vas a encontrar en diferentes Ferias del país lo que ha ayudado a enviar sus instrumentos a Estados Unidos debido a que los paisanos son sus compradores pero es más comercio local lo que le ha ayudado mantenerse en el gusto de las personas.
“Mi papá me mandó a la escuela para tocar la guitarra pero sólo fue por unos meses debido a que se fue el maestro del pueblo y algunos lauderos reconocidos de paracho decidieron abrir una escuela de laudería y fue como lo inscribieron a los nueve años”, indicó.
“Ahí fue más ayuda de los maestros con los lauderos que nos enseñaron cómo se construye una y a los 14 años empecé a hacer mis propias guitarras y ahorita tengo 40 años de vida y 20 años como constructor de guitarra”, añadió.
Para finalizar, dijo que su artesanía lleva piezas hechas con el corazón pero con conocimiento pues toda su vida y toda su sangre es de lauderos.