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León, Gto.- Familiares de enfermos renales enfrentar serios problemas económicos para adquirir medicamentos y otros para asegurar su tratamiento, al no ser cubiertos por el Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (Insabi).
Lo anterior fue asegurado a El Sol de León, al realizar un recorrido en el exterior del Hospital General de León.
DE ACAPULCO A LEÓN, Y FUE LO MISMO
Tal es el caso de Alberto López Hernández, oriundo de Acapulco, Guerrero, quien detalló que trajo a su hermano de 40 años a esta ciudad para que recibiera una atención más digna y resulta que es lo mismo aquí.
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Comentó que las hemodiálisis se le tienen que practicar a su paciente cada dos días y que cada una de ellas tiene un costo de mil 450 pesos y que son realizadas por médicos externos al Hospital General, al no ser cubiertos por el Insabi, además de tener que adquirir medicamentos que requieren, como la Quetiapina en la presentación de tabletas que tiene un precio de 250 pesos.
Aunado a todo esto, los familiares de los enfermos renales deben comprar los catéteres con un valor de 2 mil 500 pesos, para que sean colocados y los pacientes sean sometidos a las sesiones de hemodiálisis, comentó Alberto.
LEONESES SUFREN POR IGUAL
Rosario Juárez, platicó a este medio que tiene hospitalizada a su mamá la señora Felipa Pérez, que padece insuficiencia renal en la etapa terminal y que tiene internada desde hace más de tres días.
“¿En dónde está el beneficio?, ahora nosotros cubrimos los gastos cuando no contamos con el recurso necesario, el cambio de Seguro Popular a Insabi fue en perjuicio de quienes menos tienen, de las familias necesitadas”, indicó Rosario que se encontraba sentada afuera del Hospital General.
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“Todos quienes tenemos un paciente renal tenemos que cubrir el pago de una persona externa que realice la hemodiálisis”, comentó.
