León, Gto.- El arzobispo de la Catedral Metropolitana de León Alfonso Cortés Contreras, invitó durante la celebración de la misa dominical a que la ciudadanía lleve una vida llena de espíritu y gracia de Dios.
Agregó que los ciudadanos deben vaciar su vida de cosas malas, para que de esa manera Dios pueda llenarla de gracia y de buena voluntad para las acciones del prójimo.
“Lo que debemos aprender es cómo Cristo para llegar a la plenitud se vació, para que Dios lo llenara, por eso dice el mismo himno a los Filipenses, Dios le concedió un nombre que está sobre todo nombre, para que a nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo y en la tierra y toda lengua proclame que Jesucristo es el Señor”, expresó.
Alfonso Cortés comentó que cuando alguien no cumple algo en la vida, se siente frustrado y de alguna manera se siente vacío, por lo que señaló que es necesario estar en la gracia de Dios para poder llenar ese vacío.
Señaló además que en esta vida, el ser humano no se manda solo, sino que tiene que cumplir con el mandato de Dios, ya que muchas personas señalan que tienen libertad de elegir sobre su cuerpo ya que dicen ser los dueños del mismo, pero no es así.
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“Todo ser humano tiene que obedecer a su propia conciencia y nos hacemos ilusión de que nosotros hacemos lo que nos venga en gana, equivocados el más experto profesionista tiene que hacer lo que le manden en la fábrica, el empleado tiene que hacer lo que le implica su señor, el del partido político tiene que hacer lo que le manden”, comentó.
Reiteró que el ser humano tiene que seguir los pasos de Cristo para tener la gracia de Dios, ya que Cristo obedeció al padre y ahora tiene la gloria eterna, pues ayudando al prójimo se verán mejores acciones y beneficios para la vida diaria.
También dijo que el vivir una vida vacía, es deshacerse de las cosas materiales, que no dejan que la gente se una a sus seres queridos, que los hace alejarse de lo que realmente importa, pues dijo que hoy en día cada vez más se pierden los valores y la solidaridad.
Comentó que con la gracia de Dios, se puede incrementar la dignidad, la paz y la mejor calidad de vida del ser humano a nivel espiritual, siempre dejando que Cristo a través de Dios actúe en los corazones de quien tenga una vida vacía de maldad.