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El titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Crescencio Sandoval González, dio a conocer que en Guanajuato fueron detectadas nuevas formas de huachicoleo, con la colocación de tubos paralelos a los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) y donde había derivaciones para desviar el flujo del combustible.
Durante la conferencia mañanera del lunes, el titular de la Sedena informó que tras realizar un seguimiento de la ruta del combustible, encontraron que éste era desviado y fue así como detectaron la nueva forma del robo de combustible de los ductos de Pemex.
“A través del seguimiento y del análisis de las tomas clandestinas que se iban descubriendo, identificamos que había tomas que por coordenadas se salían de la ruta que teníamos marcada que seguía el ducto (...) y eso nos llevó a descubrir que había derivaciones, tubos que derivaban la trayectoria principal y que eran los que estaban empleando la delincuencia”, dijo el funcionario federal.
Luis Crescencio Sandoval dijo que se trataba de tubos paralelos que corrían junto a los ductos y que tenían derivaciones desde donde el combustible transportado era robado.
“Ya con esta información, estuvimos en contacto con Pemex y ya nos dieron una información de que existen algunos otros que en su momento se llegaron a emplear dentro del abastecimiento por ductos que quedaron fuera de servicio, pero que la delincuencia los emplea o los había estado empleando para poder robarse el combustible”.
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“Entonces, hace unas semanas descubrimos uno que era bastante largo, esa derivación, y así hemos ido detectando esas derivaciones”, explicó el titular de la Sedena.
Luis Crescencio Sandoval dijo que esta nueva forma de huachicoleo también fue detectada en Hidalgo, estado que dijo sigue siendo el primer lugar en robo de hidrocarburo.
De acuerdo con datos de Petróleos Mexicanos, durante enero de 2020 la empresa productiva del estado reportó la detección 886 tomas clandestinas de hidrocarburo, de las cuales 74 fueron localizadas en Guanajuato y que lo colocó en cuarto lugar nacional con más tomas clandestinas, superado por Puebla, con 128 tomas; Estado de México, con 148 tomas, e Hidalgo, con 301 perforaciones clandestinas de hidrocarburo; en 2019, Guanajuato cerró con mil 198 tomas ilegales de combustible.
Además, al día Petróleos Mexicanos registra un robo de aproximadamente 40 barriles diarios a través de los ductos perforados.
Durante enero también fueron recuperados cinco mil 638 litros de combustible robado de los ductos de Pemex.
