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Para comerciantes de productos de piel y calzado ubicados en la Zona Piel, la puesta en marcha del Par Vial resultó contraproducente, esto al complicar el acceso a las diferentes plazas comerciales que se ubican en el lugar, que además ha propiciado un cuello de botella en algunas de sus calles, por lo que los visitantes prefieren acudir a otras zonas comerciales de más fácil acceso.
“De por sí hablamos de la cuesta de enero, la presencia de los festejos de Feria, al desabasto de gasolina y ahora la nula información por parte de la autoridad municipal a los compradores de Zona Piel a quienes se les ha complicado acceder al corazón comercial” indicó Mario Gaona Vilchis, que cuenta con 25 años como vendedor en este lugar.
Clientes buscan fácil acceso
“Hablamos de un cuello de botella que se crea en la calle San Luis esquina esquina con Españita, que llega a crear largas filas de automóviles en espera de llegar a locales comerciales y en muchos de los casos han optado por buscar otras zonas de mejor acceso, lo que representa dejar de vender”, agregó el entrevistado.
Así también dejó en claro, que los comerciantes no están en contra de los trabajos de mejora en Zona Piel, sin embargo la puesta en marcha el proyecto del Par Vial parece haber resultado contraproducente para la mayoría de ellos, esto después de realizarse el cambio de circulación de la calle Españita que representaba un desfogue de la zona a la Avenida Hilario Medina y daba acceso a la Central Camionera.
Ahora la circulación de vehículos se ha visto afectada de sobremanera para acceder al corazón de la zona comercial y crea descontrol entre los visitantes que acuden de otros estado del país y que forman el grueso de los compradores.
Se inconforman comerciantes
Algunos de los comerciantes que fueron reubicados de la calle Españita esquina con Hilario Medina el día de hoy se manifestaron en la Dirección de Comercio y Consumo que dirige Raúl Fabricio Ibarra en busca de conciliar mejores alternativas para seguir llevando a cabo su actividad comercial tal como lo comentó Verónica Nava quien lleva 20 años de comerciante en la calle Españita.
“Somos solo uno de los tantos negocios afectados por estos cambios y en donde nunca se informó, ni se dieron alternativas para no terminar con el ingreso de decenas de familias que dependen de venta de alimentos y otros productos, a quienes buscan ponernos en un rincón y nos estamos de acuerdo” concluyó la afectada.
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