La pena de prisión en contra del exsacerdote Jorge Raúl Villegas incrementó de 90 a 117 años, luego de que el proceso fuera repuesto y la Sala del Supremo Tribunal de Justicia validara los delitos por los que se le acusaba, pero además de que encontró que éstos fueron cometidos con dolo, por lo que la medida cautelar impuesta fue la máxima.
Dalia Ramírez Delgado, abogada defensora de la víctima, explicó que luego de que la defensa del exsacerdote Jorge Raúl Villegas interpusiera una apelación y un amparo para la reposición del proceso, pues lo que buscaba era la absolución, no tanto la reducción de la pena, ésta fue aceptada y todo fue reanudado.
La abogada defensora explicó que una vez repuesto el proceso, fue acreditado de nuevo que sí se cometió la acción por la que se le acusó, que fueron los delitos de violación, corrupción de menores, abuso sexual y agresión sexual; sin embargo, la jueza que llevó el proceso aplicó un criterio discresional, pues argumentó que había un concurso de delitos y que por ello aplicaría la sanción del delito más grave.
Debido a ello, el Ministerio Público y la abobada Dalia Ramírez Delgado se opusieron a ello e interpusieron una apelación en contra de ese criterio, por lo cual el caso llegó hasta la Sala del Supremo Tribunal de Justicia.
La defensa de Jorge Raúl Villegas se inconformó, porque pedía la absolución, “ni siquiera la disminución de la pena”, recordó Dalia Ramírez Delgado, por lo cual la decisión final correría a cargo del Supremo Tribunal de Justicia.
Una vez que el Supremo Tribunal de Justicia tuvo todos los elementos e hizo análisis de ellos, el pasado nueve de noviembre determinó que en ningún momento se le violaron sus derechos, como argumentó su defensa, por lo que dieron paso para el análisis de los agravios, que la abogada Dalia Ramírez Delgado hizo valer para este nuevo proceso.
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Una vez que se analizaron las acusaciones, la juez de origen determinó que los delitos cometidos por Jorge Raúl Villegas fueron realizados en diferentes acciones y cada uno de manera dolosa “y por lo tanto debían de valorarse con la pena máxima cada uno de ellos”, recordó la abogada.
Así, la Sala del Supremo Tribunal de Justicia encontró que fueron cinco eventos de violación cometidos por el exsacerdote, uno de corrupción de menores, uno de abuso sexual y uno más de agresión sexual, por lo que en el conteo de las penas resultó que Jorge Raúl Villegas alcanzaba una pena de 117 años, cuando la sentencia original era de 90 años, por la sumatoria de los delitos.
Sin embargo, debido a que por ley existe un tope máximo de 60 años de prisión, eso sería lo que permanecería dentro de la cárcel.
Dalia Ramírez destacó que durante el proceso en ningún momento se dudó de la veracidad de los testimonios de las víctimas, lo cual fue la materia suficiente para que el exsacerdote quedara en prisión.
Largo proceso
El Sol de Irapuato publicó en exclusiva el 14 de febrero de 2017 que el padre Jorge Raúl Villegas Chávez había sido detenido durante la mañana del 13 de febrero de ese año por agentes ministeriales, pues había una orden de aprehensión en su contra por la denuncia de abuso sexual en contra de una niña de 14 años y quien era estudiante del Colegio Atenas.
Jorge Raúl Villegas, quien también fuera vocero de la Arquidiócesis de León hasta 2012, había sido contratado por la madre superiora del Colegio Atenas, Carmen Carbajal, para que ofreciera los servicios de comunión y orientación psicológica en ese plantel.
Fue durante una de esas sesiones donde el sacerdote habría abusado sexualmente de la niña.
A raíz de conocerse el caso, surgieron más testimonios de estudiantes del Colegio Atenas que habían sido abusados sexualmente por el padre Jorge Raúl.
Jorge Raúl Villegas contaba con un antecedente de una paternidad que le fue comprobada, pues tuvo una hija con una mujer mientras fungió como vocero de la Arquidiócesis de León. Por ello, en 2012, sorprendió su separación de ese cargo, justo unas semanas antes de la visita del Papa Benedicto XVI a Guanajuato.
Supuestamente, en aquel entonces la Arquidiócesis de León había suspendido al padre Jorge Raúl Villegas para ejercer el sacerdocio, pero hasta septiembre de 2017 aún aparecía en los registros de la Secretaría de Gobernación como sacerdote, por lo cual cuando cometió los abusos, a finales de 2016 y principios de 2017, seguía siendo sacerdote.
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