La Sociedad interamericana de Prensa (SIP) expresó su profunda condena y consternación por el asesinato del periodista Israel Vázquez. Este año es la décima víctima fatal de la violencia contra la prensa en México, uno de los países más peligrosos del mundo para el ejercicio del periodismo. La organización instó al Estado federal a involucrarse y obtener resultados inmediatos para frenar la violencia.
Vázquez trabajaba desde hace tres años en el medio digital El Salmantino en el estado de Guanajuato. Cubría la fuente policiaca y otros asuntos de interés local. Alrededor de las 7 de la mañana del 9 de noviembre, el periodista cubría información sobre el hallazgo de restos humanos en un barrio de la ciudad de Salamanca cuando fue atacado a balazos por sujetos que se acercaron en un vehículo. Fue traslado a un hospital, donde luego falleció. Tenía 33 años.
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Jorge Canahuati, presidente de la SIP, se sumó al pedido de los colegas de El Salmantino, que exigieron “a todas las autoridades locales, estatales y nacionales” el esclarecimiento inmediato del crimen. Canahuati, presidente de Grupo Opsa, San Pedro Sula, Honduras, aseveró que “es indignante que sigan asesinando en México a periodistas, los que son revictimizados junto a sus seres queridos por la falta de justicia. Es hora de frenar la cultura de la violencia y la impunidad”.
Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertada de Prensa e Información de la SIP y director del diario La Voz del Interior, Córdoba, Argentina, agregó que “a la violencia y la impunidad se suma la reciente decisión del Estado de recortar fondos destinados al Mecanismo de Protección para Defensores de Derechos Humanos y Periodistas, lo que aumenta el riesgo que enfrentan muchos comunicadores, principalmente en el interior del país”.
Los directivos de la SIP recordaron al gobierno mexicano que el asesinato, la violencia de cualquier tipo y la impunidad de los agresores coartan severamente la libertad de expresión y de prensa, y deben ser investigados con prontitud y sancionados con severidad, según lo consigna la Declaración de Chapultepec y la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, entre otros tratados internacionales.
En 2020 también fueron asesinados en México los siguientes periodistas: Arturo Alba Medina en Chihuahua, Julio Valdivia Rodríguez y María Elena Ferral en Veracruz; Pablo Morrugares y Víctor Fernando Álvarez Chávez en Guerrero; José Castillo Osuna y Jorge Armenta en Sonora; Fidel Ávila Gómez en Michoacán y Álvaro Ruiz en Chiapas.
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