León, Guanajuato; 19 de Mayo del 2019.- Un ambiente de fiesta es el que se vive en León, una celebración en torno a la pelota y que tiene como invitados de honor al Club León y América. Los colores verde y blanco engalanan cada rincón de la ciudad zapatera.
Horas previas para el desenlace entre fieras y águilas, miles y miles de aficionados se dan cita en el histórico Nou Camp. Algunos llegan con el rostro pintado, otros presumiendo los escudos tatuados en su piel, otros lo hacen con el pequeño en brazos, en pareja, en familia, con boleto y sin él, miles llegan al Estadio León.
La ilusión de alcanzar una final se vislumbra en los rostros de todo aficionado, después de un año sin Liguilla, disputar una semifinal es un auténtico manjar para los seguidores esemeraldas, este duelo tiene un sabor especial pues se busca rugir en casa y eliminar al vigente campeón.
León, el club que nació grande recibe al América, equipo que se dice grande pero que en el Bajío llega mermado y con la desventaja, el favorito es el equipo de casa, el súperlíder, el de mejor defensa, todos ven el triunfo a 90 minutos de dustancia, todos dan la victoria como posible porque hasta en la misma naturaleza un León es más peligroso que un águila.
