León, Guanajuato.-- Sin ser protagonista ni factor para favorecer la victoria de alguno de los visitantes, la terna arbitral encabezada por Marco Antonio Ortiz cumplió en su labor durante la semifinal entre Tigres y La Fiera.
La actuación de Marco Antonio Ortiz no tardó mucho en encontrar polémica ya que al minuto 7’ hubo un contragolpe de Club León en la que Nahuel Guzmán salió de su área para obstruir a Ángel Mena, el ecuatoriano fue derribado y cuando parecía que el portero sería sancionado con tarjeta roja por cortar una opción manifiesta de gol, la jugada se evaluó en el VAR para finalmente señalarse fuera de lugar.
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El encuentro siguió con acciones de mucho rose por ambos bandos, aunque no hubo cartones preventivos hasta pasada la media hora cuando Cota vio el tarjetón amarillo por tardar en cobrar el saque de portería.
Para la segunda parte, se dio otra jugada en la que la terna arbitral fue factor tras anularse un gol de André Pierre-Gignac por un claro fuera de lugar.
Con las emociones a flor de piel, Gignac y Stiven Barreiro se encararon por lo que Ortiz Nava los sacudió con la amarilla. Posteriormente Luis Rodríguez también fue amonestado. Por el bando visitante, el Avión Ramírez también se llevó la preventiva, el encuentro concluyó sin mayores contratiempos para el arbitraje.
