Por si la campaña con récord perdedor no era suficiente, ahora los Bravos de León sufren de un brote de Covid-19 y en donde se han detectado hasta 21 casos positivos, nueve de ellos correspondientes a peloteros, mientras que el resto son del personal del equipo y cuerpo técnico.
Ante tal situación, la Liga Mexicana de Beisbol y la misma organización leonesa anunciaron que el inicio de la serie frente a los Diablos Rojos del México pasará para este miércoles en una doble cartelera que arrancará a las 16:00 horas en el Estadio Domingo Santana.
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La directiva de los Bravos comunicó que se mantendrá apegada al denominado Plan Diamante de la LMB, esto con el objetivo de cumplir con todos los protocolos establecidos y velando siempre por la salud de sus integrantes.
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Cabe recordar que la tropa cuerera viene de una semana de gira, donde en primer turno visitó a los Guerreros de Oaxaca y posteriormente a los Mariachis de Guadalajara.
Los problemas de salud han aquejado a la novena guanajuatense en días recientes ya que el pasado martes en el primer compromiso en la Verde Antequera, el manejador interino Eddie Castro sufrió un repentino desvanecimiento cuando salió de la caseta a reclamar una decisión del ampáyer Orlando López. El dominicano sería trasladado en ambulancia a un hospital cercano al Estadio Eduardo Vasconcelos y ahí permaneció alrededor de 12 horas bajo observación.
En lo deportivo, los Bravos van por una de sus últimas llamadas en la temporada ya que con saldo de 24 ganados y 33 perdidos, se ubican a cuatro juegos y medio de la zona de playoffs. Después de recibir a los escarlatas, la escuadra de la capital del calzado irá nuevamente a Oaxaca y bajará el telón en casa ante los Rieleros de Aguascalientes.
