Horas después de haber puesto su renuncia y ser rechazada por la directiva, Ariel Holan se presentó este lunes a comandar el entrenamiento de La Fiera en las instalaciones de La Esmeralda.
El estratega argentino buscó hacerse a un lado luego de las estrepitosas caídas contra Seattle Sounders y Tigres, sin embargo, recibió el espaldarazo del presidente del Club León, Jesús Martínez Murguía, por lo que de inmediato regresó a la cancha para empezar a preparar lo que será un decisivo duelo de vuelta en la Liga de Campeones de la Concacaf y en el cual los verdes están 3-0 abajo.
El rostro de Holan no esbozó las sonrisas de otras ocasiones, el “domador” sabe que la situación luce complicada ya que el equipo, si bien en la Liga MX se mantiene en puestos de repechaje, incluso acechando la zona de clasificación directa, el funcionamiento ha ido hacia abajo y no se ve por donde pueda venir una remontada en la llave ante Seattle.
De igual forma, entre los jugadores hay descontento, el silenció imperó y eso en definitiva no es un buen síntoma en la “guarida”. La práctica fue meramente regenerativa para los elementos que estuvieron de inicio frente a la “U” de Nuevo León, mientras que el resto si realizó un poco de futbol bajo las órdenes de Holan y su cuerpo técnico.
Por lo pronto, gente como Osvaldo Rodríguez, Omar Fernández, Luis Montes y Jean Meneses, siguen con labores diferenciadas debido a molestias musculares, aunque se espera que al menos uno de estos pueda recuperarse para el choque del próximo jueves.
León trabajará nuevamente este martes por la mañana en su nueva Casa Club, en tanto que el miércoles su cita será en el Estadio Nou Camp. El elenco felino está obligado a mejorar el semblante si es que desea tener alguna chance en la Concachampions, torneo donde solo ha visto fracaso tras fracaso.
Para los esmeraldas no hay de otra más que ganar por tres, que no les conviertan y así forzar a la tanda de penales, o bien, imponerse por cuatro y que el Sounders se vaya en blanco. Un gol del conjunto de la MLS obligaría a La Fiera a hacer cinco, en algo que ya parece ser una misión prácticamente imposible.
